Aún no la ve…
Pero ya la escucha y siente,
la abuela de Júlia la mira, la ríe
y con tanto amor la mece.
Volvió a nacer de nuevo cuando
rompió a llorar y vio la luz del mundo por primera vez…
Atrás quedan tantos sufrimientos,
por su familia, por sus amados hijos,
por las enfermedades que siempre le acompañan y que hasta el momento siempre ha vencido.
Carácter especial
de alegría desbordada,
con su mirada que a veces perdida en su mundo está,
con su llanto de silencio cuando sus seres queridos no se quieren encontrar.
Ya nada es igual,
Júlia entre sus brazos y ya está…
Todo valió la pena,
incluso hasta vivir
para ser abuela de una niña
que hasta el cielo de felicidad
con su dulzura hace llorar.
«Loli»,
la vida te lo debe…
Que feliz ahora eres incluso cuando en tu silencio contigo sola estás.
Feliz Navidad…
te quiero como eres,
al igual que Júlia
como yo también ella lo hará.
Poema propio.
Fuente de la imagen… Propia