Cuánto quisiera que alguien al viento cantara mis letras.
Voces dulces y desgarradas
De quejidos, lamentos y alegrías
Que rompieran silencios,
calmaran llantos y dieran vida por unos minutos a quienes en sus vidas
solo tienen desespero.
Cómo me gustaría
coger de la mano al mundo,
mirarlo de frente y decirle gracias,
a pesar de todos los pesares,
por haberme permitido por un momento ser parte de él, conocer todo lo que conozco y lo que tengo por conocer.
Y vivir cada segundo de mi vida
como si el último fuera, como si ya nada más pudiera volver a ver.
Porque nada tuve que guardar en esta vida y ahora que te conocí,
no quiero perderte como el tiempo se pierde en su tiempo.
Cuánto quisiera ser un poeta,
hablar de la vida con alguien que la quiera conmigo hablar también,
y perderme por aquellos rincones
donde decirnos…
¿Quiénes somos?
Mirar de frente a quien se quiere
y sin bajar la mirada decir: «Te amo».
Y en la boca darle un beso mientras le dices… «Te quiero».
Cuánto quisiera que alguien al viento cantara mis letras.
Y que tú fueras el destino de un poema donde sean sus palabras las que por mí te amen verso a verso.
.
Poema propio.
Fuente de la imagen… IA