
Me dejó herido
con el olor del sudor frío,
con el alma abrazada en pena y el corazón pleno de un gran vacío.
No sé por qué la sigo amando
si ya se apartó sin haberse ido,
me abandonó por otro capricho
como la ola se pierde en la orilla
como a su dedo un gran anillo.
La echo tanto de menos
que todavía pienso que es gran sueño
el haberla conocido.
Poema propio.
Fuente de la imagen IA