
Esquinas hambrientas de humanidad.
Faltos de abrazos, amores y flores
que mueren en soledad rodeados
de triste pobreza en una vida sin piedad
ni lugar donde poner razón
cuando ninguna bondad
a su lado es esencia.
¡Para cuándo el día!
Ese mundo tan complejo, sin rumbo
y tan para nosotros irrespetuoso
que nos alejamos siendo en vida indiferencia y nos acercamos
cuando en su lecho de muerte hay sobras de algún lujo o restos de riqueza.
Vagabundo de conciencias inquietas.
Poema propio.
Fuente de la imagen…IA