Pido perdón a mis letras

No se merecen tanta tristeza,
cuando siempre están a mi lado,
en la pobreza de mi pensamiento y en su riqueza.
Cuando las musas de mí se alejan,
cuando el papel blanco suplica
que con tinta manche sentidos versos
hasta que mueran en algún poema.

Pido perdón a mis letras,

por alguna vez abandonarlas
y que por tiempo fuesen pasajeras,
por no cobijarlas cuando en mí están enfermas,
por no quererlas como ellas me quieren a mí,
a cambio de nada
y siempre para mí dispuestas.

Hoy pido perdón a mis letras,

Porque me dan la vida
cuando de mí se alejan,
cuando son plena
felicidad en mi tristeza,
y un canto de libertad
cuando del mundo mi alma se siente presa.

Hoy pido perdón a mis letras

Por no declararles mi amor,
aunque saben que mi corazón
ya nunca podrá vivir sin ellas.