No quiero nada de ti,
solo te quiero a ti.
Hoy no quise que amaneciera el día.
No quise abrir las ventanas de mis ojos;
no había nadie detrás por quien despertar la vida.
No quiero nada de ti,
solo te quiero a ti.
Hoy no quise que amaneciera el día.
A quienes más me quisieron, los perdí,
y a quienes quiero son de otras vidas.
Solo me tengo a mí,
y a veces hasta de mí yo se olvida.
No quiero nada de ti,
solo te quiero a ti.
Hoy no quise que amaneciera el día.
La cama se me hizo grande,
llena de fantasías
que a veces me hacen tan feliz
como triste,
cuando la realidad me acaricia.
No quiero nada de ti,
solo te quiero a ti.
Amor imposible,
que ahora das vida a mi vida.
