
De nadie fui perdón sin ser pecado,
de ti, solo amante sin ser amado.
Hoy que ya me has usado y vivido,
que te alejaste de mi espacio,
no vivo en ningún presente
que no esté siempre a tu lado.
Quise desahogar mi pena
y entre versos escribirte…
¡Qué ya no te quiero,
qué ya no te amo!
Pero el poema se acaba leyendo
«contigo quiero vivir»,
aunque solo me quieras
para un rato.
Poema propio.
Fuente de la imagen:
https://pin.it/5qucMTD