Creció en tiempos difíciles,
en un lugar donde la riqueza no existió.
Vivió el campo como nadie,
y el campo también a él lo vivió .
Tuvo la cultura que le dejaron,
y cinco hijos también dejó.
Hoy, en este su último día,
desde este mi pequeño rincón,
le tuve siempre respeto
y también alguna cosa tuvo
que quizás no mereció.
Descanse en paz, buen hombre.
A partir de hoy, en el cielo
también tendrá su rincón.

DEP

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