Buenas noches te digo
en mi amanecer.
Por aquí ya
Las ratas y las cucarachas
casi tropiezan y en la oscuridad
se esconden.
Empieza el alboroto del primer rayo de luz, del primer bostezo cuando junto al despertar en el abdomen acaricia el hambre.
El calor por las calles en solitario, por las aceras y asfalto ya pasea,
Los viandantes esperan que algo imprevisto cambie y en sus vidas
se cuele algo
sin saber el que…
Pero que nunca llega.
El olor a café y al primer dulce de la ciudad se adueña,
las prisas del correcalles de la vida por unos días sueñan y descansan como si su tiempo las hubiese abandonado y con ellas el reloj sin cuerda se quedara.
Todo es pleno y a la vez vacío,
todo es rutina esperando una sorpresa de otro verano que se marcha en nuestra mirada sin que haya ningún recuerdo que de nosotros se aleja.
Las primeras tormentas alumbran la llegada de un otoño
donde la magia de la vida otra vez en el tejado de otra casa
por la chimenea se dispersa .
Te espero sin tiempo y sin saber quien eres a cada instante.
Y sin tiempo…
De mí siempre te alejas.

Poema propio.
Fuente de la imagen… Propia