
no quedaron entre mis manos,
otras manos
que no fueran mis propias manos.
Nos alejó el cansancio
la vida y su rutina.
Mirar… sin saber que mirarnos,
hablar… sin escucharnos,
a no sentirnos,
y sin ya en nuestra piel
llegar a rozarnos.
Siento que ya no estamos,
ni yo al tuyo…
ni tú a mi lado.

Poema propio.
Fuente de la imagen:
https://revistacontratiempo.wordpress.com/2010/08/19/contra-el-viento-del-norte-una-mera-posibilidad/01-pareja-separada1/

