
Sangre de mi sangre
que en tan pocos días
calmas mi desespero.
Rayo de luz que alejas mis sombras,
que alumbras mis noches de desvelo.
Vivo para amarte y cuidarte
sabiendo que nunca
dejaré de hacerlo.
.gif)
Poema propio.
Fuente de la imagen cedida por su autor.
Josep Domenech I Sánchez

